9 cosas que hacen felices a los niños

Siempre queremos hacerlo bien con los niños, pero a veces no sabemos qué actitud adoptar para ser un padre modelo. Luego nos encontramos moviendo la tierra y el cielo, ofreciendo regalos desproporcionados u organizando actividades extraordinarias.

Sin embargo, ¡la infancia ya tiene la magnífica ventaja de ser el reino de las maravillas! Por lo tanto, no hay necesidad de excederse para complacer a su hijo, es en las cosas simples que se desarrollará plenamente.

¿Qué son los pilares de la felicidad de los niños? Aquí hay una pequeña guía de manejo para padres: 9 cosas que hacen felices a los niños.

1- Un entorno seguro

Si damos por sentada la satisfacción de las necesidades fisiológicas básicas, la necesidad de seguridad es lo primero en la pirámide de Maslow (¡oye, sí, revisa tus lecciones psicológicas!).

Para el niño, el entorno es mil veces más aterrador que para nosotros y las emociones se multiplican. Por tanto, la necesidad de seguridad también se multiplica por diez.

Así, evita ser brusco o impredecible, debe poder contar contigo en todo momento. Muéstrele que puede sentirse a salvo de todo peligro en casa y tranquilícelo sobre sus miedos irracionales (monstruos imaginarios, animales, payasos, tormentas eléctricas, etc.).

2- padres solidarios

Siempre anime a su hijo a descubrir o aprender y recompense sus esfuerzos diarios. No dudes en felicitarlo cuando se lo merezca (¡alabanza inútil, prescindimos!).

Evite las críticas, en su lugar ofrézcale un enfoque constructivo para mejorar donde falla. Por último, cuida tu idioma, desde pequeños los niños lo entienden todo y son auténticas esponjas.

3- Modelos a tu alcance

No crees que eres perfecto… ¡lo es! Eres su modelo, su héroe, lo haces soñar y él solo aspira a ser como tú, así que sé ejemplar. Tienes que demostrarle que eres sobre todo feliz.

Muestre entusiasmo, impulso y resistencia cuando sea necesario. Un pequeño que ve a sus padres compadecerse de su destino, pronto los imitará.

También tenga en cuenta que usted no es la única figura de identificación que utilizará para construir su identidad. Por lo tanto, si necesita que le cuiden a su hijo con regularidad, elija a su niñera de acuerdo con estos mismos criterios.

Leer: Cómo entrenar tu mente para ser positivo

4- Muéstrale que confías en él

Entre adultos, las demostraciones de confianza solo aparecen cuando hay algo en juego. ¡Con los más pequeños, esta condición no es necesaria! Los pequeños momentos de libertad, de autonomía que le das son suficientes para que se sienta tomado en serio.

Asimismo, confiarle pequeñas tareas diarias demostrará que crees en él, ¡que puede ser útil! Nada mejor para aumentar tu autoestima (tiende a flaquear por nada durante la infancia).

Algunos ejemplos tontos: "¿Puedes ir a decirle a papá que lo necesito?" Es muy importante ! »,« ¡Si pones la tapa me ayudaría mucho! “,” ¿Me ayudarás a guardar los juguetes de tu hermana pequeña? “.

9 cosas que hacen felices a los niños

5- Saber ser firme

Los mejores padres, si no son muros de piedra, tampoco son malvaviscos. Cuando es no, es no. Cuando es más tarde, es más tarde.

Sin embargo, ten cuidado de no dejarlo nunca en la oscuridad: cuando le niegues algo, explícale siempre por qué y no te quedes en una nota negativa.

"No, no hay televisión esta noche, ¡tienes que dormir bien para estar en buena forma en la escuela!" Si limpias tu habitación, mañana iremos al parque de atracciones, ¿te importa? »Y listo, convertimos un rechazo en un desafío motivador.

6- Deja que desarrolle su propia personalidad

Tal vez pensaste que serías el padre de un mini-tú, ¡lo echaste de menos! ¡Su hijo es de hecho un ser en toda regla con sus propios gustos! Puede que seas extrovertido, lleno de amigos, un apasionado de las matemáticas y la música.

Reservado para él, ama la literatura y la naturaleza. Ayúdalo a construirse, afirmarse en torno a ello, anímalo a atreverse a aventurarse hacia lo que ama.

7- Una buena dosis de juego

El juego es la principal fuente de placer y la forma de comunicación más desarrollada en los niños. Ya sea un juego de bádminton contigo, un edificio de lego en tu esquina o una carrera de autos de juguete con tu vecino, sea cual sea el contexto.

Varíe las fuentes de diversión tanto como sea posible para que no equipare el placer del juego con una situación específica.

8- Acepta su privacidad

Sí, ya sea a los 3, 5 u 8 años, ya tenemos un jardín secreto, ¡y no queremos que papá mamá venga a husmear adentro!

Este pequeño trozo de madera que ama en secreto, esta famosa Manon de la que no quiere contarte, esta dolencia que misteriosamente tenía ... es su privacidad, no hay necesidad de meter la nariz en ella.

Lo ideal es que el niño necesite un lugar para estar tranquilo: ya sea su habitación, la sala de juegos o una choza en el jardín, no entre a toda costa, es su reino.

9- Evita las comparaciones

“Tu hermano, a tu edad, ya se estaba arreglando los cordones de los zapatos”, “¿tenías 14 en la historia? eso es genial ! ¿Y cuánto tenía la pequeña Margot? »: Estas son sentencias que deben prohibirse. Primero, cada uno es único y se destaca en diferentes áreas.

En segundo lugar, este tipo de comportamiento sabotea la confianza que su hijo de alguna manera ha construido para sí mismo. Finalmente, es la mejor forma de generar celos e iniciar conflictos (mención especial para comparaciones entre hermanos y hermanas).

Conclusión

En conclusión, para hacer feliz a tu hijo, presta atención a dos aspectos principales:

El medio ambiente: ¿su hijo tiene acceso a su alrededor a las cosas (tangibles e intangibles) necesarias para su desarrollo?

Identidad: ¿lo ayudas a desarrollarse, construirse, animarle a afirmar su personalidad?

Deje un comentario