Algodistrofia: prevención y tratamiento.

Algodistrofia: prevención y tratamiento.

Prevención de la algodistrofia

Medidas preventivas básicas preventivas básicas

  • Movilización temprana. Después de una fractura, las personas que observan una inmovilización a corto plazo y comienzan rápidamente la rehabilitación de la extremidad después de una fractura reducen el riesgo de desarrollar algodistrofia o síndrome de dolor regional complejo.
  • Vitamina C después de una fractura. Estudios1,2 demostró que los pacientes que tomaban suplementos de vitamina C a diario después de una fractura de muñeca reducían el riesgo de desarrollar un síndrome de dolor regional complejo.
  • Deja de fumar. El tabaquismo es un factor que aumenta el riesgo de padecer distrofia.

     

Tratamientos médicos para la algodistrofia

No existe un tratamiento específico para la distrofia. En algunas personas se encuentra una combinación de tratamientos de fisioterapia y ciertos medicamentos para reducir el dolor y mantener la movilidad articular.

Los tratamientos son más efectivos cuando se inician poco después del inicio de la enfermedad. Pueden retrasar la progresión de la enfermedad y, a veces, hacer que los síntomas desaparezcan por completo.

La mayoría de los adolescentes con la afección se recuperan por completo. Algunas personas, a pesar del tratamiento, todavía tienen un dolor constante o paralizante, así como algunos cambios externos irreversibles.

Rehabilitación. Un programa de ejercicio adecuado ayuda a mantener activas las extremidades adoloridas y puede mejorar la circulación sanguínea. Los ejercicios pueden mejorar la flexibilidad y la fuerza de las extremidades afectadas.

TENS (estimulación nerviosa eléctrica tanscutánea). Este es un tratamiento que utiliza un dispositivo que envía pequeñas descargas eléctricas a través de los nervios para adormecer el dolor.  

Acuoterapia. Los programas de ejercicios acuáticos son particularmente efectivos. Muchos pacientes son sensibles a la temperatura y se sienten más cómodos en agua caliente para hacer sus ejercicios.

Psicoterapia. Las personas que sufren de un dolor constante pueden desarrollar depresión o ansiedad que afectan sus vidas y sus familias. En ocasiones, el apoyo psicológico es necesario para ayudar a las personas con la enfermedad a gestionar su vida diaria y facilitar su rehabilitación.

Medicamentos para reducir el dolor

Diferentes combinaciones de fármacos pueden ser eficaces para aliviar los síntomas del síndrome de dolor regional complejo. La eficacia de los tratamientos puede variar de una persona a otra.

  • AINE para reducir el dolor y la inflamación: aspirina, iburpofeno (Advil®, Motrin®), naproxeno (Aleve®).
  • Corticosteroides para tratar la inflamación y la hinchazón: prednisolona y prednisona.
  • Antidepresivos tricíclicos: amitriptilina o nortriptilina.
  • Inyecciones de toxina botulínica.
  • Opioides: Tramadol®, morfina.
  • Cremas anestésicas tópicas: lidocaína y ketamina.
  • Inhibidores de la recaptación de serotonina-noradrenalina: venlafaxina o duloxetina.
  • Gabapentina (Neurontin®, un anticonvulsivo) y pregabalina (Lyrica®, un anticonvulsivo y analgésico)
  • La calcitonina o los bisfosfonatos son útiles para ayudar a mantener o fortalecer la densidad ósea.

Terapias de inyeccion

Varias terapias de inyección o bloqueo implican inyectar una sustancia que inhibe temporal y localmente la actividad del sistema nervioso simpático para bloquear la sensación de dolor. A veces se utilizan anestesia troncal y bloqueo intravenoso regional.

Otros métodos más invasivos y, por tanto, más riesgosos incluyen la neuroestimulación, la infusión intratecal de clonidina y la estimulación de una región de la médula espinal.

Las personas con un dolor muy intenso que dura mucho tiempo suelen responder peor al tratamiento. En ocasiones, estas personas necesitan seguir un programa de tratamiento adaptado a su dolor crónico.

 

Deje un comentario