¿Cómo puede ayudarme durante 9 meses?

Adáptese a sus limitaciones diarias

Es obvio, pero vale la pena recordarlo: cuando estás embarazada, no tienes los mismos hábitos que antes. La fatiga del embarazo puede hacer que cambie su ciclo de sueño, acostarse más temprano y / o tomar una siesta por la tarde. Los hábitos culinarios también se alteran, ya que se deben evitar ciertos alimentos y bebidas. Por no hablar de los alimentos que de repente ya no queremos para nada, incluso el olor que nos molesta… Entonces, una buena forma de que tu compañero te apoye en estos cambios, es que él también adopte estos nuevos ritmos y limitaciones. ! ¡Reconozca que es más agradable compartir un vaso de jugo de fruta juntos, en lugar de verlos disfrutar con nostalgia de un vaso de vino tinto o un plato de sushi! Lo mismo ocurre con la siesta: ¿por qué no tenerlo enamorado en lugar de vivir fuera de los caminos trillados?

 

Ir a visitas prenatales y ecografías

Es un poco "la base" en términos de apoyo a las futuras madres. Estas visitas son fundamentales para controlar el embarazo y permitir que nuestros hombres comprendan mejor las transformaciones en nuestro cuerpo. Y es a menudo durante el primer eco, al escuchar los latidos del corazón del feto, que el hombre se da cuenta plenamente de que va a ser papá, que su paternidad se concreta. Son encuentros importantes, donde la pareja fortalece sus lazos y su vínculo. ¿Y por qué no seguir con un pequeño restaurante para dos?

 

Cuida los trámites administrativos

Darse de alta en la sala de maternidad, declarar el embarazo a la Seguridad Social y la CAF, buscar el cuidado de los niños, planificar las citas médicas… El embarazo esconde tareas administrativas restrictivas y aburridas. ¡No necesariamente lo que más preocupa a una mujer embarazada! Si tu hombre no tiene fobia administrativa, puedes sugerirle que se encargue de enviar ciertos documentos, para que no tengas que llevar sola tu “expediente” de embarazo. ¡Especialmente si lo odias!

Darle masajes ...

El embarazo no es una aventura fácil, pone a prueba el cuerpo. Pero existen soluciones para ayudarlo a sobrellevar la situación, una de las cuales es el masaje. En lugar de aplicar solo tu crema anti-estrías, puedes ofrecerle a tu pareja que te masajee el estómago. Sería una buena manera de lograr que domesticara tus nuevas curvas y, ¿por qué no comunicarse con el bebé? Si le duele la espalda o si le pesan las piernas, también puede masajearlas con cremas adecuadas. En el programa: ¡relajación y sensualidad!

Prepara la habitación del bebé

Una vez que el embarazo está bien establecido, es hora de pensar en preparar la habitación de tu pequeño. Para los futuros padres, elegir juntos la decoración de la habitación de su pequeño es realmente un buen momento. En el lado de la producción, por otro lado, ¡es él solo! No debe exponerse a pinturas, que pueden emitir compuestos tóxicos. Y no se trata de llevar muebles, por supuesto. ¡Deje que su cónyuge se involucre! Será una buena forma para que él invierta en el embarazo a largo plazo y se proyecte con el bebé.

Hacer compras

¡Sí, puede ser así de fácil! Una mujer embarazada debe evitar llevar cargas pesadas, especialmente si su embarazo corre un riesgo potencial. Entonces, si el futuro papá quiere ayudarte, sugiérele que se involucre más en las compras, si no lo estaba antes del embarazo. No parece mucho, ¡pero te dará mucho alivio!

 

Participar en clases de preparación para el parto.

Hoy en día muchas preparaciones para el parto se pueden hacer en pareja, incluso se recomienda para que el padre se sienta involucrado en el nacimiento de su hijo y comprenda el calvario que atravesará su pareja. Y el día D, su ayuda podría ser invaluable y reconfortante para la futura madre. Ciertos métodos como el Bonapace (digitopresión, masajes y relajación), la haptonomía (entrar en contacto físico con el bebé) o el canto prenatal (vibraciones sonoras en las contracciones) dan un lugar de honor al futuro papá. ¡No más padre al margen en el taller!

Organizándose para el gran día

Para asegurarse de que esté allí el Día D, aconséjele que aborde el tema con su empleador, para advertirle que tendrá que ausentarse abruptamente para asistir al nacimiento de su hijo. Tu pareja puede preparar todo lo que no es imprescindible, pero importante para los dos: una cámara para inmortalizar el primer encuentro con el bebé, cargadores de teléfono para evitar la avería, nebulizador, pañuelos, música, qué comer y beber, ropa cómoda. … Y para que sepa qué esperar en la sala de partos -si desea asistir al parto del bebé-, proponga leer también algunas cosas sobre el parto y sobre los diferentes escenarios posibles (cesárea de emergencia, episiotomía, fórceps, epidural, etc.). ¡Sabemos que un hombre informado vale dos!

Yo soy su cortador de encaje

“Durante el segundo embarazo de mi pareja, le di muchos masajes en la espalda porque tenía mucho dolor. De lo contrario, nunca hice mucho, porque en general ella luce como un encanto hasta el final. Sí, una cosa, al final de cada embarazo, ¡me convierto en su encajera oficial! "

Yann, papá de Rose, 6 años, Lison, 2 años y medio y Adèle, 6 meses.

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