Cómo preparar a un niño para la escuela: recomendaciones de un psicólogo

¡Qué rápido pasa el tiempo! Hasta hace poco, estabas esperando el nacimiento de tu bebé y ahora está a punto de pasar al primer grado. A muchos padres les preocupa cómo preparar a sus hijos para la escuela. Realmente deberías estar desconcertado por esto y no esperar que todo se resuelva por sí solo en la escuela. Lo más probable es que las clases estén abarrotadas y el maestro simplemente no podrá prestar la atención adecuada a cada niño.

Preparar a un niño para la escuela es una cuestión que preocupa a todos los padres. La voluntad está determinada tanto por lo intelectual como, en muchos aspectos, por su base psicológica. Para dominar las habilidades necesarias para la enseñanza en la escuela, es suficiente dedicar de 15 a 20 minutos al día. Una gran cantidad de manuales de desarrollo y cursos preparatorios vendrán a ayudar.

Es mucho más difícil preparar a un niño desde el punto de vista psicológico. La preparación psicológica no surge por sí sola, sino que se desarrolla gradualmente a lo largo de los años y requiere un entrenamiento regular.

Cuándo comenzar a preparar a un niño para la escuela y cómo hacerlo correctamente, le preguntamos a la psicóloga médica del centro psicoterapéutico Elena Nikolaevna Nikolaeva.

Es importante crear una actitud positiva hacia la escuela en la mente del niño de antemano: para decirle que en la escuela aprende muchas cosas interesantes, aprende a leer y escribir bien, hará muchos nuevos amigos. En ningún caso debes asustar a tu hijo con la escuela, los deberes y la falta de tiempo libre.

Una buena preparación psicológica para la escuela es un juego de “escuela”, donde el niño aprenderá a ser diligente, perseverante, activo, sociable.

Uno de los aspectos importantes de la preparación para la escuela es la buena salud del niño. Por eso es fundamental endurecerse, ejercitarse, ejercitarse y prevenir los resfriados.

Para una mejor adaptación en la escuela, el niño debe ser sociable, es decir, poder comunicarse tanto con sus compañeros como con los adultos. Debe comprender y reconocer la autoridad de los adultos, responder adecuadamente a los comentarios de sus compañeros y mayores. Comprender y evaluar acciones, saber qué es bueno y qué es malo. Se debe enseñar al niño a evaluar adecuadamente sus capacidades, admitir errores, ser capaz de perder. Por lo tanto, los padres deben preparar al niño y explicarle las reglas de vida que lo ayudarán a integrarse en la sociedad escolar.

Dicho trabajo con un niño debe comenzar con anticipación, desde la edad de tres a cuatro años. La clave para una mayor adaptación indolora del bebé en el equipo escolar son dos condiciones básicas: disciplina y conocimiento de las reglas.

El niño debe darse cuenta de la importancia y responsabilidad del proceso de aprendizaje y estar orgulloso de su condición de estudiante, sentir el deseo de lograr el éxito en la escuela. Los padres deben mostrar lo orgullosos que están de su futuro alumno, esto es muy importante para la formación psicológica de la imagen de la escuela, la opinión de los padres es importante para los niños.

Las cualidades necesarias como la precisión, la responsabilidad y la diligencia nunca se forman de inmediato; se necesita tiempo, paciencia y esfuerzo. Muy a menudo, un niño necesita el apoyo simple de un adulto cercano.

Los niños siempre tienen derecho a cometer errores, esto es característico de todas las personas, sin excepción. Es muy importante que el niño no tenga miedo de cometer errores. Al ir a la escuela, aprende a aprender. Muchos padres regañan a los niños por errores, malas calificaciones, lo que conduce a una disminución en la autoestima del niño en edad preescolar y al miedo a dar un paso en falso. Si un niño comete un error, solo debe prestarle atención y ofrecerle o ayudarlo a solucionarlo.

El elogio es un requisito previo para corregir errores. Incluso para los pequeños logros o logros de los niños, es necesario recompensarlos con estímulo.

La preparación no es solo la capacidad de contar y escribir, sino también el autocontrol: el niño mismo debe hacer algunas cosas simples sin persuasión (ir a la cama, lavarse los dientes, recoger sus juguetes y, en el futuro, todo lo que sea necesario para la escuela. ). Cuanto antes los padres comprendan lo importante y necesario que es esto para su hijo, mejor se formará el proceso de preparación y educación en su conjunto.

Ya desde los 5 años, un niño puede estar motivado para aprender determinando lo que le interesa. Este interés puede ser el deseo de estar en un equipo, un cambio de escenario, un ansia de conocimiento, el desarrollo de habilidades creativas. Fomentar estas aspiraciones, son fundamentales en la preparación psicológica del niño para la escuela.

El desarrollo integral de un niño es una garantía de su futuro aprendizaje exitoso, y todas las habilidades y aspiraciones inherentes a la infancia se realizarán necesariamente en una vida adulta e independiente.

Sea paciente y considerado, y sus esfuerzos están destinados a producir resultados notables. ¡Buena suerte!

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