Cinco bebidas de verano bajas en calorías

Verano, calor... Es hora de olvidarse de los lattes helados y las limonadas con sabor a azúcar. Las bebidas caseras de verano de las que te vamos a hablar son igual de ricas, pero además contienen un mínimo de calorías.

    1 Agua de coco

El agua del corazón de los cocos verdes jóvenes es una excelente opción cuando todo se derrite con el calor. Es ideal para recuperarse del ejercicio o para saciar la sed en la playa. El agua de coco contiene mucho potasio y menos calorías que una bebida deportiva regular, además no tiene azúcar ni colorantes.

El agua de coco se vende en la mayoría de las tiendas naturistas, pero si estás de vacaciones en los trópicos, no hay nada mejor que abrir un coco fresco. El agua de coco se puede beber sola o hacer un batido.

     2. Kombucha

Kombucha se promocionó originalmente como una panacea para todo, desde la artritis hasta el cáncer. Esta bebida se obtiene como resultado de la fermentación de té, azúcar, levadura y bacterias vivas.

Aunque los beneficios para la salud de esta popular bebida aún no están científicamente probados, la abundancia de probióticos y enzimas vivas en la kombucha es muy beneficiosa para la digestión y el equilibrio de las bacterias intestinales.

Debido a que la salud intestinal juega un papel muy importante en la inmunidad, la salud mental y la energía, se recomienda incluir kombucha en su dieta diaria. Tenga en cuenta que en China ha sido un "elixir de vida" popular durante muchos siglos.

La kombucha se puede fermentar en casa o se puede comprar una bebida preparada.

     3. Té helado casero

El verano es un buen momento para disfrutar de las propiedades curativas de los tés de hierbas, con hierbas frescas, limón y miel.

Sus contrapartes en las tiendas están demasiado saturadas de azúcar, y el té helado casero puede ayudar a la digestión (té de menta) y calmar el sistema nervioso (té de manzanilla). Añade vitamina C del limón natural o haz una bebida antibacteriana con miel.

Remoja la menta en agua hirviendo durante 30 minutos. Agrega una cucharada de miel por litro y refrigera. Puedes exprimir rodajas de limón: ¡el té frío natural está listo! 

      4. Zumo recién exprimido

El jugo proporciona instantáneamente energía a las células del cuerpo. Es rico en enzimas vivas, clorofila, vitaminas y minerales. Las enzimas ayudan a la digestión, y esta es la principal garantía de una piel radiante, alta inmunidad y energía. La clorofila que se encuentra en los alimentos verdes actúa como desintoxicante y purifica la sangre.

El jugo recién exprimido alcaliniza el cuerpo y ayuda en la digestión durante los intensos picnics de verano.

Puedes comprar jugo fresco en la tienda, pero si tienes un exprimidor, es más económico hacerlo tú mismo. Pruebe los jugos verdes de col, pepino, perejil, jengibre, limón y manzana verde. Es mucho mejor por la mañana para obtener energía que una taza de café.

      5. Agua con frutas, cítricos y hierbas

La combinación clásica de agua con limón se puede complementar con bayas frescas, pepinos y hierbas (menta, albahaca). En el verano, aumentan las necesidades de líquidos, y beber esa agua no solo es agradable, sino también útil. El limón tiene un efecto beneficioso sobre el hígado al aumentar la secreción de bilis. Los pepinos alivian el estrés debido a su contenido de vitamina B. Experimenta con tus comidas favoritas para que cada próximo vaso de bebida te brinde más belleza y salud.

Deje un comentario