5 razones para añadir cúrcuma a tu dieta

Originaria de la India, la especia se ha utilizado durante miles de años. Estudios recientes confirman que los componentes activos de la cúrcuma -curcumina y aceites esenciales- tienen un amplio espectro de acción: antiviral, antiinflamatorio, antifúngico, antitumoral. En primer lugar, ayuda a reducir los niveles de colesterol total, en particular el colesterol “malo” en sangre. En segundo lugar, la curcumina previene la oxidación del colesterol “malo”. Esto es muy importante, ya que el colesterol oxidado es un asesino del cuerpo. Se asienta en las paredes de los vasos sanguíneos, formando placas. Al reducir el colesterol oxidado, la cúrcuma reduce el riesgo de accidentes cerebrovasculares y ataques cardíacos. Según varios estudios, la cúrcuma reduce el dolor de la inflamación en la artritis, la tensión muscular, el dolor en las articulaciones, la caries dental y cura heridas y hematomas. La cúrcuma también ayuda a combatir los radicales libres en la sangre. Prevención del cáncer, ralentizando la velocidad de su propagación, deteniendo las transformaciones precancerosas. Actualmente, los científicos continúan realizando investigaciones sobre los efectos de la cúrcuma en ciertos tipos de cáncer. La muscoviscidosis se considera una enfermedad genética en la que los pulmones se ven afectados por una mucosidad espesa, que no solo dificulta la respiración, sino que también interrumpe la digestión y detiene la absorción de vitaminas. La curcumina a nivel celular previene la acumulación de mucosidad. La curcumina atraviesa la barrera hematoencefálica, previniendo, ralentizando y deteniendo la progresión de enfermedades del sistema nervioso. Según la investigación, la curcumina actúa a diferentes niveles en el cuerpo cuando se trata de enfermedades neurodegenerativas. Hay muchas opciones para agregar la cúrcuma a su dieta diaria, incluyendo

Deje un comentario