Cómo vestir a tu hijo para la nieve

Polar, suéter y camiseta

Como regla general, juntar capas delgadas de ropa, es un sistema ideal para mantener el aire frío afuera. Muy pegada al cuerpo, la camiseta larga es ideal, pero ojo, sobre todo no con algodón, porque es un aislante muy pobre. Por el contrario, es necesario mantener el cuerpo caliente y expulsar la humedad.

Bajo el traje de neopreno o el anorak, el forro polar ha demostrado su eficacia: se seca rápidamente y conserva el calor, una gran ventaja cuando baja la temperatura. Otra opción, el tradicional jersey de lana, igual de cómoda.

Una alternativa: el chaleco

Una alternativa interesante a los jerséis: los cárdigans, porque son fáciles de poner y quitar. Piense en ello especialmente durante el verano, en caso de un pequeño enfriamiento de la temperatura. Si opta por un chaleco delantero con cremallera, tenga cuidado de que la cremallera no suba demasiado en el cuello. Otra opción, ¡el chaleco envolvente que se cierra con broches o botones! Por otro lado, nunca use imperdibles, ni siquiera los llamados "seguridad". Asimismo, evita botones o cremalleras en la espalda: recuerda que tu bebé pasa mucho tiempo acostado, y que este pequeño detalle rápidamente puede resultar incómodo.

Revisa escotes y sisas

Los escotes deben ser lo suficientemente anchos para que puedas ponerle el suéter a tu bebé sin forzar la cabeza. Por lo tanto, elegimos cuellos con broches (ideal) o botones para que gradualmente pueda entrenarse a sí mismo para vestirse. A partir de los 2 años, piensa también en los cuellos en V. Asimismo, las amplias sisas, tipo americano, te facilitarán el vestir, tanto si lo estás ayudando como si él prefiere valerse por sí mismo.

Evita los cuellos de tortuga

Se debe evitar el cuello de tortuga, al menos hasta dos años, porque es difícil de pasar y puede resultar molesto. Y, por supuesto, ¡nos saltamos la bonita cinta o el pequeño cordón que podría enredarse alrededor del cuello del bebé! A partir de los 2 años, será él mismo quien podrá darte su opinión. Elija sisas anchas, o sisas tipo “americano”, que brindan mayor comodidad. Asimismo, los bordes del jersey o chaleco no deben ser abultados ni desagradables al tacto.

Mono y guardapolvos

Muy recomendado para niños pequeños, el traje completo: práctico, protege eficazmente del frío y, con él, no hay riesgo de que la nieve entre en el pantalón. Sin embargo, un inconveniente es que la pausa para orinar puede resultar más complicada (desabrochar botones, tirantes, etc.). Preferimos los tejidos transpirables e impermeables, con materiales sintéticos en lugar de naturales (Nylon o Gore-tex, por ejemplo).

Guantes, gorro y bufanda

Particularmente sensibles al frío, las manos pequeñas requieren especial atención. Para los más pequeños, prefiera las manoplas, porque mantienen los dedos calientes entre sí. Los guantes y manoplas generalmente permiten un mejor agarre (toque y agarre de los bastones de esquí). En cuanto al material, sin lana, inadecuado para la nieve, prefiera un material sintético impermeable (a base de Nylon o Neopreno, por ejemplo), para que la nieve no penetre, y un forro transpirable.

Imprescindible, el sombrero o pasamontañas y el pañuelo. ¡Prefiera un pasamontañas para esquiadores en ciernes, más adecuado para usar un casco, y asegúrese de que la bufanda no sea demasiado larga!

Medias y calcetines

Las medias proporcionan una protección eficaz contra el frío. Si opta por los calcetines, no superponga dos pares, lo que interferiría con la circulación de la sangre y, por tanto, sería sinónimo de frío. En cuanto a los materiales, nos decantamos por las fibras sintéticas que respiren y se sequen rápidamente: las microfibras de poliéster huecas de poliamida proporcionan una buena relación térmica / suavidad / evacuación de la transpiración.

También existen fibras antibacterianas especialmente adecuadas para calcetines. Permiten luchar eficazmente contra el desarrollo de bacterias (malos olores).

Gafas y mascarilla

No olvide la máscara o las gafas para proteger los ojos de su hijo del resplandor del sol. La mascarilla es una solución ideal, porque cubre bien el rostro y no corre el riesgo de resbalarse por la nariz. Eche un vistazo a las pantallas duales, que proporcionan una mejor ventilación y evitan que se empañen. Hay monturas de todos los tamaños y formas para adaptarse a todas las formas faciales.

Si tu elección son las gafas, opta por una montura de plástico, ideal para la práctica de deportes de tabla. Sólidos, deben estar bien envolventes para no dejar salir el viento o los filtros UV.

Un punto en el casco

Bien adaptado a su cráneo, no debe interferir con la vista o el oído, para que tu pequeño esquiador sea consciente de los movimientos y ruidos a su alrededor. Ventilado y templado, debe estar provisto de una correa de barbilla ajustable y cómoda. Recuerde, por supuesto, comprobar que el equipo cumple con las normas (NF o CE).

Deje un comentario