Piedras preciosas y su influencia en una persona.

En el antiguo Egipto y otras culturas antiguas, a las piedras preciosas se les atribuía una amplia gama de efectos sobre la salud, mientras que hoy en día tienen fines principalmente decorativos. Las piedras preciosas también se utilizan para restaurar el campo energético, encontrar la paz, el amor y la seguridad. En algunas creencias, se colocan piedras en determinadas zonas del cuerpo, llamadas “chakras”, que favorecen la curación. En otras culturas creían en el poder energético de la piedra, simplemente llevándola como colgante alrededor del cuello o como aretes. Se cree que la popular piedra preciosa Cuarzo Rosa ayuda a aliviar los dolores de corazón. Asociado con el amor, el Cuarzo Rosa tiene una energía suave y calmante que afecta a quien lo porta en consecuencia. Para obtener el mejor efecto, se recomienda llevar la piedra rosa en un colgante alrededor del cuello. Así, la piedra está cerca del corazón, ayuda a curar las heridas del corazón, promueve el amor propio y mantiene el corazón abierto a relaciones positivas. Las joyas con piedra de cuarzo rosa serán un buen regalo para una persona que vive una ruptura familiar, una separación de un ser querido cercano, una alienación y cualquier conflicto del mundo interior. Los magníficos y profundos tonos rojos de una granada activan las habilidades restauradoras de su dueña (maestra). Da impulso al cuerpo, revitaliza, favorece el bienestar emocional, aumenta la confianza en uno mismo. Existe la creencia de que la piedra protege del mal y del mal karma. El lugar óptimo del cuerpo para una granada es al lado del corazón. La amatista morada da fuerza, coraje y paz. Estas cualidades también promueven la curación. Una piedra calmante con propiedades pacíficas, energía calmante, también promueve la liberación de la creatividad. Gracias a las propiedades tranquilizadoras de la amatista, es recomendable regalarla a personas inquietas, que sufren cambios de humor y diversas adicciones. La amatista se usa en cualquier parte del cuerpo (anillos, aretes, pulseras, colgantes). Diferentes en tono, forma y tamaño, las perlas promueven el equilibrio corporal y crean sentimientos positivos y felices en quien las lleva. En los sistemas de salud tradicionales asiáticos, las perlas se utilizan para tratar el sistema digestivo, los problemas de fertilidad y el corazón. Algunos creen que el polvo de perlas ayuda con afecciones de la piel como la rosácea. El ámbar amarillo, marrón, rojo se considera una piedra preciosa que alivia los dolores de cabeza, el estrés y promueve la autoexpresión. También promueve la limpieza, ayudando a eliminar enfermedades del cuerpo y aliviar el dolor. Una piedra lunar pura, blanca y al mismo tiempo iridiscente aporta equilibrio a su poseedora, especialmente para las mujeres. Desde la antigüedad, los viajeros han utilizado esta gema como talismán protector.

Deje un comentario