¿Qué es la reflexología plantar?

¿Qué es la reflexología plantar?

¿Qué es la reflexología plantar?

La reflexología es una técnica manual practicada desde la antigüedad la cual forma parte de la medicina natural, conocida desde hace milenios por tener la capacidad de actuar sobre todo el cuerpo, esta disciplina dio origen a la reflexología plantar.

La reflexología plantar es el uso de técnicas de masaje y acupresión en todos los pies, estudia la actividad refleja física y patológica que precede a una enfermedad. Este método de apoyo se basa en la existencia de zonas reflejas en los pies, que representan cada órgano del cuerpo humano.

En efecto, el pie es la representación miniaturizada del cuerpo humano: a cada zona refleja corresponde un órgano, una glándula o una parte del cuerpo. Este sistema osteoarticular se mantiene y funciona gracias a un conjunto de músculos y ligamentos para mantener en equilibrio la masa total del cuerpo. El bucle reflejo enviará señales al sistema nervioso central que enviará señales al órgano o glándula, a la región en disfunción. Un toque específico aplicado a las zonas reflejas permite localizar tensiones y otras disfunciones. La activación de determinados puntos por simple presión permite actuar sobre los órganos en desequilibrio o ensuciados para mejorar su estado o revitalizarlos.

El trabajo del reflexólogo permitirá que el cuerpo se regule y alcance un estado de equilibrio llamado homeostasis. Para conocer la causa de sus dolencias, el reflexólogo procederá a un interrogatorio muy preciso de la persona. En la mayoría de los casos, las dolencias se deben al estrés o problemas familiares. También pueden tener su origen en problemas relacionados con el entorno en el que evoluciona la persona, y que hacen que el organismo reaccione en consecuencia. La reflexología puede aliviar el dolor a distancia, por eso el reflexólogo debe conocer con precisión la anatomía del cuerpo y los puntos reflejos a nivel del pie para poder aliviar el dolor y tratar el problema de la persona.

El objetivo del terapeuta es, por tanto, ayudar al organismo a obtener la autorregulación y la autocuración.

Una breve historia de la reflexología

La reflexología ha sido practicada por diferentes pueblos desde la antigüedad. Se reconoce que la primera forma de reflexología se originó en China y se remonta a más de 5000 años. Un libro de medicina china fechado entre 1000 y 400 años antes de Cristo relata pasajes sobre reflexología. Los chinos siempre le han dado al pie un lugar importante en el cuerpo humano y la etimología de la palabra " pie " en chino significa para ellos “Parte del cuerpo que protege la salud”. Existe alguna evidencia que sugiere que las civilizaciones india, inca y maya también utilizaron la reflexología podal. Dieron gran importancia a los pies para mantener un equilibrio físico, mental y espiritual. Los pies, en contacto con la Tierra, recibieron energías positivas. En Egipto, los frescos de las tumbas datan de casi el año 2 a. C. y representan figuras que manipulan pies. El iniciador de la podoreflexología moderna fue el doctor William Fitzgerald a principios del siglo 300 en los Estados Unidos. Es el fundador de lo que llamó “Terapia de Zona” y gradualmente integra esta terapia en su práctica. Así, imagina una primera localización de las zonas reflejas dividiendo el cuerpo humano en diez zonas iguales y cada una de estas zonas corresponde a un dedo de la mano o del pie. Están interconectados por la circulación de flujos de energía. Fue la Dra. Eunice Ingham, fisioterapeuta estadounidense y asistente del Dr. Fitzgerald, quien difundió este método. Seducida por las teorías del Dr. Fitzgerald, a principios de la década de 1930 desarrolló la reflexología tal como la conocemos hoy. Es autora del primer tratado de reflexología moderna en el que todo el cuerpo está literalmente "mapeado" en manos y pies. Hoy en día, Guy BOITOUT y Jean-Pierre VALADA, dos fisioterapeutas y osteópatas franceses, han revolucionado el mapeo inicial con un mapeo más preciso y detallado que ha dado lugar a una reflexología occipito-podal más dinámica, justa y eficiente.

Los beneficios de la reflexología podal

Los beneficios de la reflexología podal: física, psicológica y emocional

El método es suficiente por sí solo para un gran número de patologías menores, siempre con un espíritu de complementariedad al tratamiento médico.

La lista de posibilidades terapéuticas es extensa:

  • Sistema musculoesquelético: traumatología y reumatismo Tortícolis, epicondilitis, tendinitis, dolor de espalda, lumbago, ciática, cruralgia, artrosis leve, etc.
  • Sistema hormonal: pubertad, menopausia, problemas de tiroides, diabetes no insulinodependiente.
  • Sistema cardiovascular : taquicardia, edema de estasis, hipertensión leve
  • Sistema ORL: sinusitis, bronquitis, asma laringitis rinofaringitis
  • Sistema nervioso cerebroespinal: trauma a los nervios craneales y nervios periféricos.
  • Aparato digestivo: hernia de hiato, estreñimiento espasmódico, gastritis.
  • Sistema urinario: retención, incontinencia.
  • La piel: eczema, acné, psoriasis.
  • Sistema genital: infertilidad funcional, trastorno de próstata, dismenorrea.
  • Alteraciones de los órganos de los sentidos: trastorno oculomotor, tinnitus unilateral, vértigo.
  • Dolores de cabeza tensionales, migrañas.
  • Enfermedades psico-funcionales o psicosomáticas
  • Patología del recién nacido y la infancia: regurgitación gastroesofágica faringitis colitis agitación o apatía.

¿Quién lo practica?

Hoy en día, cada vez más profesionales de la salud y terapeutas están interesados ​​en la reflexología y se están formando. Este es el caso de determinados podólogos, enfermeras, auxiliares de enfermería, médicos o psicólogos. La mayoría de los reflexólogos acreditados proceden de una formación profesional diferente y han optado por volver a formarse en una profesión más manual, centrada en las personas y el bienestar. Para poder practicar basta con estar certificado en reflexología.

Varias escuelas en Francia ofrecen una formación completa en reflexología plantar, pero también auricular, palmar y endonasal. Si eres curioso, paciente y te gusta el masaje, es muy posible e incluso recomendable que te ocupes de tus pies y de los de tus seres queridos. Al tomarte el tiempo de masajearte los pies, mientras intentas estimular ciertos puntos de reflexología, puedes descubrir y sentir una sensación muy placentera de reconectarte contigo mismo, de cuidarte, incluso si algunos puntos pueden ser dolorosos. en el momento. Con gestos simples, precisos y suaves, puede hacer felices a sus hijos o su cónyuge, y crear otros lazos, a veces más fuertes y reconfortantes.

Por supuesto, esto no reemplaza el saber hacer de un reflexólogo que tendrá la experiencia y el sentimiento necesarios para guiarlo hacia un reequilibrio y autorregulación de todo su organismo.

Para quien ?

La reflexología podal se recomienda para:

  • Fortalecer la acción de los tratamientos médicos y reducir los efectos secundarios mediante una mejor eliminación de toxinas.
  • En el postoperatorio para reducir los efectos secundarios de la anestesia:
  • En los casos de trastornos funcionales en los que los sistemas neuroendocrino, vascular y energético juegan un papel importante, las reflexologías tienen una eficacia del 80%.
  • En el caso de afecciones agudas o crónicas el reflexólogo adaptará los cuidados con precaución.
  • En caso de alergias o infecciones invernales para reequilibrar el suelo orgánico
  • Para la relajación, relajación profunda para eliminar el estrés.

Una sesión puede variar de persona a persona y será, por ejemplo, suave para los niños y muy enfermos, frágiles, ancianos o incluso burn-out. La sesión puede ser más dinámica para quienes están muy cansados. El proceso de curación también se basa en la participación activa del paciente en su cuidado. El médico cura, pero es el paciente quien se cura. Por lo tanto, no debe ser un simple espectador, debe ser un actor de su salud para que esto funcione.

¿Cómo se realiza una sesión de reflexología podal?

Durante la primera sesión, el practicante realiza una entrevista precisa, denominada anamnesis, durante la cual la persona manifiesta sus dolencias y síntomas. El reflexólogo realiza una síntesis y un diagnóstico, luego adapta el protocolo terapéutico. El individuo se quita los zapatos y se acomoda cómodamente en un sillón o en una camilla de masaje, con la cabeza ligeramente levantada. El practicante está sentado, al nivel de los pies de la persona. La primera intención es relajarse y ganar confianza en el paciente.

El terapeuta puede realizar ciertas manipulaciones en puntos específicos del pie para relajar a la persona. Indica al individuo los puntos precisos sobre los que está trabajando y éste le puede transmitir sus sentimientos. Durante el tratamiento, la persona puede quedarse dormida. Los efectos pueden ir acompañados de forma inmediata o en las horas siguientes de una serie de signos parasimpáticos como somnolencia, bostezos, tos, hambre, sed, ganas de orinar, sudoración, palidez, dolor de cabeza ...

Ciertos síntomas pueden aparecer dentro de los dos o tres días posteriores al tratamiento, como rigidez, mejoría del tránsito intestinal, aumento del volumen urinario, sudoración más profusa y maloliente… Estos son los signos de eliminación de toxinas. Estas reacciones son beneficiosas porque son crisis de eliminación curativa aguda. Son deseables pero no sistemáticos, específicos para cada persona y regidos por la ley de Hering que postula que el mal comienza de adentro hacia afuera. El seguimiento se realiza en tres o cuatro sesiones espaciadas con tres semanas de diferencia según la naturaleza del problema, luego el terapeuta y la persona hacen un balance. Una sesión dura aproximadamente una hora.

La sesión se vive como un momento privilegiado de relajación, comunicación confidencial.

La reflexología plantar es un arte ancestral de cribado para la prevención y tratamiento de los reflejos, descubrirás qué es esta práctica, su historia, quién la ejerce y a quién va destinada, así como los múltiples beneficios que aporta el curso de una sesión y las contraindicaciones.

¿Cuáles son las contraindicaciones?

Existen pocas contraindicaciones.

Si el reflexólogo toma ciertas precauciones solo el período agudo de trombosis venosa flebitis, y los casos de infecciones graves con riesgo de propagación deben considerarse como una contraindicación absoluta. Se deben evitar los masajes localizados en el área del corazón en casos de descompensación cardíaca, arritmias o hipertensión arterial severa.

En caso de embarazo, no se masajearán las zonas glandulares y genitales durante los primeros tres meses. Durante los siguientes meses el reflexólogo observará una gran precaución.

A nivel de los pies en casos de sospecha de hinchazón, fracturas, esguinces, reumatismo hiperalgésico, la reflexología está contraindicada.

La opinión de los especialistas

Virginie Gigon, reflexóloga

En nuestra sociedad occidental, nuestros pies sufren abusos con demasiada frecuencia. Encerrados y apretados en zapatos estrechos e incómodos, asfixian y aprietan. Olvidamos que gracias a ellos caminamos, corremos, saltamos, bailamos y hasta nos deslizamos. Nos estabilizan, nos reenfocan, nos anclan en el momento presente y nos conectan a la Tierra. Nos llevan y nos apoyan durante toda nuestra vida.

Cuando decidimos cuidar nuestros pies, en realidad es todo nuestro organismo el que volvemos a armonizar y fortalecer. La reflexología plantar le da a los pies la ligereza, flexibilidad y suavidad que necesitan, y ayuda a tu cuerpo a limpiarse para recuperar la energía. Pude observar, durante mis pocos años de práctica en la oficina y en el servicio hospitalario, que una sesión de reflexología plantar podía, desde un principio, mejorar el estado psíquico, físico y emocional del receptor. No reemplaza los tratamientos farmacológicos ni los consejos médicos, sino que ayuda a la persona hacia el bienestar y la curación. Para la mayoría de las personas con cáncer, este tratamiento alivia el dolor mediante su acción relajante y reequilibrante de los sistemas ortopédico y parasimpático. La reflexología podal también ayuda a soportar la carga de la enfermedad y los tratamientos intensos, devolviendo al cuerpo la energía que necesita para combatir el cáncer. La podoreflexología debe ser reconocida, apreciada e integrada a diario en nuestro mundo médico y occidental. Esta terapia es fundamental para recuperarse sin problemas.

Danièle Marlasca Chevallier, reflexóloga

La reflexología es un excelente método de prevención y detección de áreas patológicas. Desafortunadamente, todavía es poco conocido en Francia. ¡El pie es el cuerpo humano en miniatura! Todo está en los pies y todo es accesible bajo nuestros dedos Si la acción del terapeuta es determinante, predomina la reacción ligada a las capacidades propias de la persona. Ya sea en un hospital o en una oficina, el tratamiento terapéutico en la mayoría de los casos proporciona relajación, alivio, drenaje y relajación general.

El reflexólogo debe mostrar humildad de discernimiento y sentido común frente a su paciente. Debe ser humilde porque no podrá resolverlo todo, pero su intención es devolver el equilibrio físico, psíquico y emocional a su paciente. El reflexólogo también tiene un papel muy importante a la hora de asesorar y dirigir al paciente a su médico si es necesario. Después de varios años de práctica, siempre me sorprenden las reacciones y los beneficios de las técnicas. El conocimiento profundo de la anatomía es imperativo y permite tomar medidas con gran precisión. Es una verdadera pasión para mí.

Deje un comentario